Calma

Hoy es un buen día... para mantener calma... ese dulce sentimiento de tranquilidad... de paz... de sosiego... sobre todo cuando Dios entra en el panorama... De repente, tal parece que la tormenta ya no nos amedrenta (Marcos 4.35-41)... aunque esta arrecie... porque cuando enfocamos en la presencia del Señor... aunque las cosas a nuestro alrededor empeoren... vemos las infinitas posibilidades divinas (Lucas 1.37)... vemos Su poder... vemos Su amor... y nuestro interior se llena de una seguridad y de una fortaleza que no es nuestra...que asombra a los que nos observan... y aún a nosotros mismos... Hoy es un buen día... para enfocar en Aquel que nos da una paz que el mundo no nos puede dar (Juan 14.27) ... y no nos puede quitar... ¡Sí, hoy es un buen día!

A todo color

Hoy es un buen día... para recordar que somos llamados a hacer la voluntad de Dios... Hay muchas cosas en este mundo... y aún dentro de nosotros mismos... que no provienen de Dios (1 Juan 2.15-17)... por tanto, es necesario que tengamos presente la realidad de este reto... de esta lucha interna que tenemos... Y es que querer... y hacer... la voluntad de Dios da un brillante color a nuestras vidas... Colores que tanta falta hacen en medio de este mundo gris empañado por el pecado... y la falta de amor... Cuando obedecemos a Dios acercamos el Reino de los cielos a los que nos rodean... y somos cual pinceladas coloridas que matizan su existencia con tonalidades divinas... Hoy es un buen día... para tener presente que estamos en el mundo... aunque no somos del mundo (Juan 17.13-16)... para pintarlo con el color de la presencia de Aquel que habita en nosotros... ¡Sí, hoy es un buen día!

Asidos

Hoy es un buen día... para agarrarnos a Sus promesas... Dios nos ha dado preciosas y grandísimas promesas (2 Pedro 1.3-4)... No obstante, para obtener las mismas hay dos elementos esenciales que tienen que darse en nosotros: fe que cree y confía en Aquel que hecho el pacto con nosotros... y esperanza que aguarda con paciencia el cumplimiento de las mismas a través del tiempo y de las circunstancias (Romanos 8.25)... Tal vez nos impacientemos con los demás... o quizás hayamos perdido la esperanza en nosotros mismos... o puede ser que nuestra fe en Dios penda de un hilo... pero recordemos... cada una de las promesas que Dios nos hace... se cumplirán... porque fiel es Su naturaleza... Hoy es un buen día para asirnos con más fuerza a la Palabra que Dios nos ha dado... ¡Sí, hoy es un buen día!

Reposo

Hoy es un buen día... para reposar y estar confiados... Cuando tenemos el privilegio de conocer a Dios... y conocer lo que dice Su Palabra... tenemos la opción de creer o no en lo que ella se dice... Si decidimos no creer continuaremos afanados... cargados... preocupados en cuanto a lo que será de nosotros y de nuestras vidas... Mientras que si decidimos acompañar ese conocimiento con la fe... podremos descansar y confiar... sabiendo que Dios está en control... que tiene cuidado de nosotros... y que a la postre El siempre quiere hacernos bien (Efesios 4.2-3)... Hoy es un buen para escoger... escoger conocer a Dios y Su Palabra... y añadirle fe a esa elección.. porque "Sólo aquel que cree entra en Su reposo" . ¡Sí, hoy es un buen día!

Otoño

Hoy es un buen día... para saber que aún cuando llegamos a los años otoñales de nuestra vida... y en nuestras cabezas comienzan a caer esas hojas blancas que develan el paso del tiempo... podemos sonreir y saber que estamos en nuestra segunda primavera... que en Dios nuestro desgaste exterior vela una maravillosa renovación interna (2 Corintios 4.16)... que añade vitalidad y fecundidad sin precedentes... Hoy es un buen día para abrazar los años que Dios nos ha dado... y considerar la sabíduria que en la vida hemos ganado (Salmo 90.12)... ¡Sí, hoy es un buen día!

"En las profundidades del invierno finalmente aprendí que en mi interior habitaba un verano invencible." ~Albert Camus (1913-1960), novelista, ensayista, dramaturgo y filósofo francés nacido en Argelia. Premio Nobel de Literatura 1957